El Pozo de La Salud llevaba ya un tiempo sin poder utilizarse ya que el agua necesitaba ser filtrada para ser apta para el consumo. Cuando esté finalizada esta rehabilitación sus usuarios podrán volver a hacer el uso que hacían antiguamente del mismo.

Operarios del Ayuntamiento de La Frontera están, en estos momentos, trabajando en la canalización, vía subterránea, colocando una tubería desde el Balneario hasta el Pozo para que el agua cuando llegue a éste ya llegue filtrada para su uso. El Balneario ha cedido la infraestructura que ellos utilizan para depurar el agua; de esta forma, la labor del ayuntamiento consiste en hacer llegar la red de agua apta para el consumo hasta el pozo.

Las aguas de este enclave turístico eran declaradas de utilidad pública en 1949, clasificadas como cloruradas sódicas con un componente elevado de sulfatos y bicarbonatos, al tiempo que contienen cantidades importantes de fosfatos, hierro, potasio, litio, amonio y silicio entre otros, especialmente indicadas para problemas reumáticos, cutáneos, digestivos, circulatorios, y estrés. Actualmente el Balneario del Pozo de La Salud es el encargado de dar diversos tratamientos.

Además de esta rehabilitación, en este lugar, considerado como un enclave turístico dentro del Municipio, se llevarán a cabo labores de acondicionamiento de los jardines y limpieza de la zona; todo ello dentro de la II Fase de Rehabilitación de Espacios Públicos que el Ayuntamiento iniciaba a primeros de verano, un proyecto con el que ya se han acondicionado diferentes zonas turísticas y de ocio.


Cartel informativo en el Pozo de la Salud.