De otra parte, nos informó de que en los próximos días nos convocarían para acordar los servicios mínimos para la huelga, y que después de esta nos llamarían de nuevo para negociar la homologación, aunque rechaza emplear dicho término. Reconoció también, para nuestra sorpresa, que habría que separar cualquier acuerdo de calidad educativa de un acuerdo sobre retribuciones. Al finalizar la reunión, el Comité de Huelga entregó un borrador de propuesta de acuerdo por la calidad educativa, insistiendo en su carácter de borrador, y en nuestra disposición a abrir una negociación paralela y diferenciada de la homologación, con la participación de padres y alumnos.

Advertimos en la reunión, ante las notas de prensa anunciando para el día 9 de abril una reunión entre la Consejería y los sindicatos firmantes del preacuerdo rechazado por el profesorado el 30 de enero, que este Comité es la única instancia que en nombre del profesorado está legitimada para negociar la homologación.

Los acontecimientos posteriores desautorizan por completo las palabras del Viceconsejero y ponen de manifiesto las intenciones reales de la Consejería. En primer lugar, intentan que el Comité de Huelga acepte un marco de negociación, en el que los firmantes puedan llegar a un acuerdo con la Consejería, una vez disuelto el Comité de Huelga. Así se pone de manifiesto en la reunión del día 9 en la que piden convocatoria de la Mesa Sectorial de Educación para tratar nuestra reivindicación. En segundo lugar, enfrentarse, desde el Parlamento al profesorado, repitiendo el discurso de su acuerdo retributivo con contrapartidas, rechazado por el profesorado.

Los hechos muestran, una vez más, que esta Consejería, y este gobierno, fingen negociar, y no quieren hacer ningún esfuerzo por mejorar la calidad educativa.

El profesorado no va a renunciar a la consecución de estos objetivos. El Comité de Huelga llama al profesorado a apoyar la convocatoria de huelga de los días 22, 23 y 24 de abril, y las concentraciones y movilizaciones. Llama también a generalizar la suspensión de salidas de los centros, a no participar en actividades de formación. Llama a no programar para el próximo curso, ni actividades complementarias ni extraescolares, y a reducir al mínimo legal nuestro trabajo en los centros hasta tanto se resuelva el conflicto. A la vista del infame comportamiento de los sindicatos firmantes, desautorizados por el profesorado, pide que los centros manifiesten su protesta.