Ahí tienen, en un archivo ZIP comprimido, las fotos de estos tres símbolos anacrónicos antes de ser retirados (dobles para que se vea tanto en primer plano como con el entorno) y una del MOMENTO HISTÓRICO de la retirada del relativo al Colegio de Ntra. Sra. de La Concepción, el jueves 4 de septiembre de 2008.

Hay que felicitar pues al Ayuntamiento de La Orotava, donde por acuerdo unánime de todos los partidos (CC, PSOE, IpO, IU-Los Verdes y la abstención del PP) se decidió en Pleno hace dos años la retirada de toda la simbología franquista existente. En diciembre de 2006 sería retirado el del edificio de Correos y Telégrafos en el centro del municipio -el más impactante de todos-, y meses después, la Placa en honor de los Caídos de la Iglesia de San Juan Bautista del Farrobo en la Vila de Arriba. Previamente había sido retirada la Placa en honor de los Caídos de la Iglesia de La Concepción y cambiados los nombres de la Plaza del General Franco por Plaza del Ayuntamiento y Avda José Antonio por Avda. Emilio Luque.

En ese mismo acuerdo está contemplado el cambio de nombre de las calles que quedan con nombres relativos a ese período, tema que según fuentes a la que se ha tenido acceso, se halla en fase de solución definitiva tras los trámites que se requieren a tal efecto. Además, la creación de una Comisión de Estudio sobre esa época que incluya el Bucio de Maja, presunta fosa-oquedad común y más emblemática de Tenerife, donde se supone se hallan los restos de diferentes represaliados por el franquismo.

En ese sentido la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de la Isla de Tenerife (ARMHIT), apoya esta iniciativa del Ayuntamiento y el pueblo de La Orotava, les felicita porque haya coincidido con la semana en que el Juez Garzón ha desencadenado la mayor actuación judicial en el Estado español sobre los represaliados del franquismo y les anima a acelerar el proceso del cambio de nombre de las calles que aún quedan, así como a la puesta en marcha de la Comisión citada sobre ese período y la fosa-oquedad del Bucio de Maja en Las Cañadas del Teide, y en la que esta asociación prestará todo el asesoramiento y apoyo posibles a la misma. De igual modo, anima a todos los Ayuntamientos de la Isla en los que quedan calles o símbolos de ese aciago período, a hacer lo propio que el Ayuntamiento de La Orotava y retirarlos de inmediato, y más, cuando la Ley de Memoria Histórica, recientemente aprobada en el Parlamento y el Senado español, así lo determina. Al mismo tiempo incitarles a todos ellos, así como a todas las Instituciones canarias, a remitir al Juez Baltasar Garzón todos los datos de represaliados franquistas existentes en sus municipios y de los que cada Organismo público tenga referencia.



Agapito de Cruz Franco. Secretaría de la “Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de la Isla de Tenerife.