La Escuela Insular de Silbo empezará a funcionar con un programa formativo de dos horas semanales en cada uno de los seis municipios gomeros. Desde ayer miércoles está abierto el plazo para que jóvenes y mayores se apunten a las clases.

La Escuela Insular de Silbo ha sido promovida por el Cabildo para extender la enseñanza del singular lenguaje gomero a todos los adultos, vecinos de La Gomera y visitantes, que estén interesados en saber comunicarse como lo hacían los antiguos pobladores de la isla. Se ha diseñado un primer programa formativo que se concretará en dos horas lectivas semanales, siempre en horario de tarde, y que se ampliará en función de la respuesta y la demanda de los usuarios.

“Lo que sí es ya una realidad es la apertura de la matrícula, que se puede realizar en horario de tarde y en los espacios cedidos por cada uno de los Ayuntamientos gomeros”, comenta el presidente del Cabildo para después añadir que a instancias de la Corporación insular Hermigua ha cedido las instalaciones de la Casa de la Cultura, lo mismo que Vallehermoso y Valle Gran Rey; Alajeró, el local municipal de Imada; el registro de entrada del Ayuntamiento, en Agulo, y el Archivo Histórico, que también es sede central de la Escuela Insular de Silbo, en San Sebastián.

Avanza, además, que para favorecer la participación del mayor número posible de personas, y teniendo en cuenta los horarios laborales, las clases también tendrán un horario de tarde y serán totalmente gratuitas, al menos en este primer curso, pues está previsto cobrar una matrícula simbólica a partir del segundo año de funcionamiento del centro.

Seis monitores contratados por el Cabildo se encargarán de impartir las clases, que comenzarán en enero y que en principio serán al aire libre, aunque aún no se ha fijado el lugar exacto de docencia en cada municipio. “Podría ser una plaza pública, un campo de fútbol o una cancha deportiva de cada municipio”, indica Eugenio Darias, coordinador de la Escuela Insular de Silbo, antes de comentar que está prevista la distribución de carteles y la emisión de cuñas radiofónicas para trasladar información precisa a todos los interesados.

Eugenio Darias aprovecha también para recordar que la Escuela Insular de Silbo está pendiente de las autorizaciones que debe emitir la Consejería de Educación del Gobierno canario para reglar la enseñanza de la Escuela Insular de Silbo y extender así la formación que ya reciben los niños y las niñas de la isla dentro del programa educativo que se imparte en los colegios gomeros.

“La reciente declaración internacional del silbo gomero como Patrimonio de la Humanidad debe implicar un compromiso de todas las administraciones, pues este lenguaje ha dejado de ser patrimonio exclusivo de La Gomera, para serlo de todo el Planeta. En consecuencia, ahora más que nunca se hace necesario un esfuerzo común para contribuir a su protección, a su mejor conocimiento y a su expansión por el mundo, a lo que desde el Cabildo contribuiremos con la referida Escuela Insular”, concluye Curbelo.