La figura del legendario luchador galdense Miguel Cabrera Castillo Mandarria, marca toda una larga época de la lucha canaria, convirtiéndose en un luchador que puede erigirse -incluso a día de hoy- en prototipo de luchador canario.

Es más, su buen hacer en las luchadas celebradas a lo largo de casi tres décadas hacen que no se conciba la lucha canaria de fines del s. XIX y principios del s.XX sin él. Y es que su casi total omnipresencia en el cartel de las luchadas, sus continuos y sonados desafíos, significaron un importante reclamo para los espectáculos de lucha canaria que se celebraron.

Labor reconocida tanto por la afición como por sus más temibles adversarios del sur, como es el caso de José Navarro El Rubio, en un alarde de humildad deportiva, llegó a reconocer: ... A mí, en desafío, no hubo más que un luchador que me tirara, y ese hombre fue “Mandarria”, el luchador más grande que ha habido, y el de más picardía también. Tenía mucho arte y mucha blandura ...


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