La asociación se manifiesta sorprendida ante la indiferencia de la institución universitaria frente a un asunto que, sin duda, se encuentra en auge en el seno de la sociedad canaria. “Parece mentira que la máxima institución cultural permanezca estancada en el pasado, cerrándole las puertas a la investigación científica y a la superación de rancios prejuicios”, explican. Las razones esgrimidas por la Vicerrectora, María Gracia Rodríguez Brito, a su juicio “demuestran únicamente su gran desconocimiento y falta de educación democrática”.
Ossinissa explica que en el resto del Estado, la promoción de la cultura bereber está a la orden del día. Asimismo, apuntan a la reciente inclusión de la lengua bereber (la que hablaron los antiguos canarios) en los estudios ofertados por la UNED en ciertas comunidades autónomas, así como la creación del Observatorio Catalán de la Lengua Amazighe.
Para la asociación, resulta vergonzoso que a Canarias se le pongan trabas a la hora de crear el espacio más básico y simple para comenzar a estudiar seria y objetivamente esta parte fundamental de nuestra cultura, “dada su innegable vinculación con el mundo bereber desde su nacimiento”.
Por otra parte, califican de “monótonas, aburridas y desfasadas” las continuas publicaciones acerca de porcentajes, genes y orígenes de los canarios. “Se está manoseando un discurso altamente politizado con el fin de erradicar cualquier parentesco con nuestros antepasados”, asevera Ossinissa. “Ya desde el siglo XVI, a través de los cronistas, se conocía el origen bereber y la pervivencia mayoritaria de la población autóctona, datos corroborados por la Ciencia en sus distintas disciplinas”, argumentan. Al igual que con las declaraciones de la Vicerrectora, aseguran que “estos estudios con finalidad política más que científica, nuevamente muestran viejos miedos y prejuicios por parte de una Institución que pretende abordar una civilización a la que no sólo desconoce, sino que le da la espalda”.
Por si fuera poco, según Ossinissa, en algunos medios de comunicación “se ha jugado a la demagogia, empleando imágenes que muestran una tendencia arabizante y deformada del bereber y su cultura, con el fin de aumentar el distanciamiento del pueblo canario hacia sus orígenes y sus parientes de la costa de enfrente”.