Revista nº 1040
ISSN 1885-6039

Juan de Vera.

Domingo, 24 de Enero de 2010
Redacción BienMeSabe
Publicado en el número 297

Dice el cantar: Salimos del Ateneo/ por la calle Juan de Vera/ cuando vimos a Nijota/ con Veremundo Perera. Pero ¿sabemos quién fue realmente Nijota o Veremendo Perera? ¿Y Juan de Vera? Ofrecemos una sinopsis biográfica del escritor lagunero, popularmente conocido por Juan de Vera. Vicente Juan de Vera Marrero nace en abril de 1901 en la Vega de Aguere (La Laguna, Tenerife) y muere con 61 años en julio de 1962.

 

 

De padre militar, se incorpora como soldado en 1924 en las Campañas de Marruecos, y es ahí donde se concreta su vena periodística ya que empieza a ejercer como Corresponsal de guerra en África, bajo el seudónimo de Vejota. Comienza a publicar en la Gaceta de Tenerife sus primeras notas de prensa informando de la tropa canaria, los aconteceres de la guerra o la añoranza de su tierra. La recopilación de todos esos artículos le lleva a publicar su primer y único libro, llamado Los soldados de Infantería de Tenerife en Campaña. Cartas de Marruecos.

 

En 1925 regresa a Tenerife y trabaja con su hermano mayor Narciso. Continúa con su labor de escritor autodidacta realizando varias publicaciones de carácter local o provincial. Años más tarde también colabora con su hermano en el semanario Informaciones.


Durante varios años, hasta 1932, publica en el periódico vespertino Las Noticias bajo el seudónimo de León del Prado. Ya por esos años de la década de los 30 comienzan a hacerse notorios y notables sus primeros escritos en los que se refleja su timidez, su amor por la naturaleza, la belleza de la mujer canaria, sus profundos sentimientos por el terruño, sus costumbres y tradiciones, o su hondo fervor religioso. Por ejemplo, en su escrito titulado "Pinos y laureles", en el que exalta distintos paisajes de Tenerife:

 

 

Los pinos de La Esperanza se distinguen a lo lejos formando en el horizonte ilusión de cielo y tierra; si es en invierno, sus troncos están repletos de nieves; si es en verano, sus tallos tienen densas esmeraldas.


Al contemplar esos pinos del monte de La Esperanza con sus agujas tejiendo entre las brumas ensueños, el alma canaria siente la verdad de lo infinito… ya que en un fondo amasado con puestas de sol y alba, ha de estar siempre en los ojos la silueta incomparable del Teide altivo y gigante. Al contemplar los laureles del Monte de Las Mercedes se concibe claramente el cielo azul teñido desde Anaga a Punta Teno.


En la quietud de la tarde, cuando en La Laguna admires el circuito de montañas que rodean su Vega, has de exaltar las bellezas divinas de cuanto existe. ¡Oh pinos de La Esperanza! ¡Cuándo los volveré a ver! En mis últimos suspiros -si muero en tierras distantes- os envío la oración que aprendí desde pequeño ante la imagen divina del Cristo de La Laguna.

 

 

 

Fue un conocido tertuliano con un fino sentido del humor, muy socarrón y romántico, a la vez que solidario con los más necesitados.

 

En 1935 contrae matrimonio con Dña. Dolores Espinosa Perera, con quien tuvo dos hijos, Juan y Francisco. Posteriormente empieza a trabajar en el Ayuntamiento de La Laguna hasta sus últimos días de julio del 62.

 

 

 

Su fervor religioso y su carácter solidario lo podemos apreciar en su pequeño relato titulado “Llagas”:

 

 

¡Señor!, danos sólo una gota de la sangre que mana de tus llagas para inundar los ojos que están ciegos: los pobres ojos que en la sombra viven ignorándolo todo entre sus dudas.


Muy horrible es sufrir sumido de continuo en las tinieblas. Yo deseo la fe, la luz de un sol que le dará ilusión a incertidumbres.


Permitirnos besar únicamente a las divinas llagas de tus pies. ¡Señor de cuanto existe! Y en cambio yo te dejo libre el paso para que Tú penetres dentro de un corazón y lo ilumines, con el rubí sangrante de esas llagas.

 

 

 

Para mayor información sobre este personaje ilustre, recomendamos el libro La obra inédita de Juan de Vera Marrero. Escritor de La Laguna y la Naturaleza. Compilación realizada por Ascensión de Vera Hernández, publicado por el CCPC y el Ayuntamiento de La Laguna.
 

 

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