I. Introducción
La experiencia llevada a cabo desde nuestro Centro durante el curso académico 2003/ 2004 dentro del Programa Educación Patrimonial, se basó en la elaboración de dos propuestas de investigación. La primera de ellas diseñada para la villa histórica de Betancuria titulada Betancuria vive de su Historia, y una segunda que desarrollamos bajo la denominación de La Florida, un proyecto de futuro gracias a nuestro pasado.
Los dos proyectos se pusieron en práctica con alumnos y alumnas de 4º de la ESO, siguiendo la línea de trabajo que el Departamento de Geografía e Historia ha venido desarrollando en los últimos años, poniendo especial énfasis en el trabajo con fuentes orales, imprescindibles a la hora de rescatar la historia más reciente de Fuerteventura, lo que todavía pervive en la memoria colectiva de nuestros abuelos y la que es necesaria recoger de forma urgente, si no queremos perder definitivamente parte de nuestro pasado más reciente. En una isla donde asistimos a un desarrollo intensivo en la mayoría de los sectores, y donde la pérdida de gran parte de nuestro patrimonio es más que evidente, se hacen imprescindibles actuaciones y programas como el que nos ocupa, destinados en este caso a los más jóvenes. Esta actuación, además, venía a responder a la demanda que desde los Centros Educativos tenemos los profesores de crear nuevas experiencias motivadoras para nuestros alumnos/as, así como un apoyo a la hora de trabajar los contenidos canarios de una forma creativa. El contenido del Programa, en su base relacionado con el incentivo de los valores patrimoniales, refuerza además otros valores de tipo educativo y didáctico que se desprenden de la puesta en práctica del mismo (motivación, creatividad, trabajo en equipo, autonomía...), y que lo convierte en un Programa integral e innovador.
El equipo de profesores/as que abordamos este trabajo de investigación nos propusimos los siguientes objetivos: a) dar a conocer parte del patrimonio cultural de Fuerteventura a los/as alumnos/as; b) valorar el estado actual y sensibilizar a los más jóvenes sobre su importancia; c) crear conciencia críticasobre el uso que se hace del mismo; d) hacer propuestas concretas de actuación en los lugares elegidos; y f) fomentar el uso de la investigación como metodología de trabajo.
II. La Florida, un proyecto de futuro gracias a nuestro pasado
Los contenidos que trabajamos dentro de esta propuesta fueron los siguientes:
a) La Florida. Descripción y situación geográfica.
b) Importancia histórica, cultural y etnográfica del conjunto patrimonial.
c) Propuestas de actuación.
La labor de investigación se inició en unas clases teóricas en las que se acercó a los participantes el concepto de Patrimonio y se dieron nociones básicas relacionadas con la labor investigadora, imprescindibles para comenzar a trabajar. En otro sesión, se van aportando lugares conocidos y con posibilidades de actuación por tener gran interés patrimonial dentro de la geografía majorera, que despiertan curiosidad entre los/as alumnos/as y que posteriormente se visitan.
La Florida es una pago del municipio de Tuineje, donde se encuentra un conjunto de casas tradicionales majoreras que podrían datar, según nuestras investigaciones, del siglo XVIII, ubicadas en un enclave singular y con interés histórico, paisajístico y etnográfico indudable. Las antiguas casas se encuentran rodeadas por numerosas gavias e inmensas llanuras, las cabras son sus únicos habitantes, también existe un pozo y restos de una antigua tahona. En la actualidad el poblado se encuentra totalmente abandonado, muchas de sus viviendas se encuentran sin techo y los alrededores sin actividad alguna.
Este conjunto patrimonial es un claro ejemplo de la arquitectura tradicional majorera y de la lucha de sus hombres y mujeres por la supervivencia, como bien expresa González Ortega:
. (...) el hombre de la isla construyó siempre cerca de donde trabajaba; por eso los terrenos del interior, adonde conduce el pastor el ganado en busca de pastos, están salpicados de pequeñas y elementales construcciones hechas de piedras, sostenidas por el milagro de la paciencia (...). Suelen ser, al menos la mayoría de las de los campos, casas de una sola planta levantadas en mitad de la soledad de las llanuras (...).
. (...) [en] las formas de construcción del pasado llaman la atención dos tipos de casas, reflejo de las diferencias sociales: la casa grande, con balconada y escalera de piedra, que es propia de las casas de los burgueses rurales, la otra, la de las casas humildes, de una sola planta a la que cubre un techo de torta. Como costumbre nacida de la necesidad, en la eterna carencia del agua, el majorero construye techos planos que recogen lo que cae del cielo y aljibes para guardarlo donde mueren los caños (...). Junto a las paredes y el suelo del hogar sólo tierra, paja y piedras surge el corral para el ganado y los taros para guardar los quesos (...).
. (...) el paisaje arquitectónico del pasado, con colores nacidos de la tierra, se resiste a desaparecer. Se alzan con orgullo entre las calles dormidas de los pueblos del interior o las llanuras inmensas del país (...)1.
|
Pero este antiguo núcleo poblacional, hoy olvidado y desconocido para la mayoría de los majoreros, aparece como un pago importante en el sur de la isla y visitado por ilustres viajeros. Tal es el caso de Verneau, que hace referencia a La Florida en los siguientes términos: Hasta las inmediaciones de Tuineje ocurre lo mismo, y en esta región se encuentran dos pequeños oasis: San Andrés y La Florida2.
También fue lugar de importancia histórica, ya que fue punto de referencia en las Batallas de Tamasite y Llano Florido, cuando se produjeron los ataques de la piratería inglesa a la isla de Fuerteventura durante el siglo XVIII, y que nos dan muestra de la importancia del lugar durante ese periodo. El libro Ataques ingleses contra Fuerteventura hace las siguientes menciones sobre La Florida:
. (...) un vecino del pago de La Florida, el primero con que tropezaron los ingleses en su marcha hacia el interior...
. (...) Matías Domínguez (...) niño todavía, llegó llorando hacia las cuatro y media de la madrugada a casa del presbítero don José Antonio y su hermano el alférez Manuel Cabrera, en La Florida, pago situado a kilómetro y medio en línea de recta y dirección noroeste de Casilla blanca (...) mientras un tercero reunía cuantos pudieran tomar las armas en el pago de La Florida, para dirigirse en pos de los ingleses, al mando del alférez (...).
. (...) el contingente de La Florida llegó a las afueras de Tuineje, donde el alférez Manuel Cabrera ordenó el alto y que allí mismo le esperasen (...).
. (...) el señor teniente coronel don Joseph Sánchez Umpierres, gobernador de las armas de esta isla, quien venía de su cortijo de los Arrabales, y así mismo con algunos vecinos del lugar de Tuineje y otros de La Florida (...)3.
|
La Florida, por otra parte, ha estado y sigue estando presente en la memoria viva de muchos de los que fueron sus habitantes, y que tanto ayer como hoy siguen recordando la niñez o la juventud vivida y ya perdida, entre aquellas paredes, entre aquellas llanuras de la Fuerteventura de no hace tanto tiempo... Juan Betancor, importante poeta popular y decimista del pueblo de Tuineje, recordaba en su vida Vida y décimas de Juan Betancor:
. Sí, señor, esa es mi vida: nací en 1900 en donde le dicen La Floría, un pago de Tuineje con pocas casitas entonces (...).
. Cuando se casó con mi madre, lo convidaron al cortijo de La Floría y allí nacimos (...). Nos criamos en esa Floría y nada más que sembrar y arar cosas de la labranza de las camellas y los camellos (...). Jugábamos al chiviví, a la rayuela y el bayoyo y a Tuineje veníamos pa las fiestas de San Miguel (...). El viejo estaba de mayordomo en la finca de uno de Santa Cruz, D. Víctor Pérez, y tenía a su cargo 20 ó 30 medianeros. Allí escapamos bien, porque mi padre tenía una décima parte de todo lo que recogíamos (...).
. Esta es la tierra más buena que hay en el mundo. En Fuerteventura, aunque uno tenga hambre, si no tiene pan se pide, no se roba: pero siempre los de fuera han venido a robarnos lo poco que nos quedaba (...). Cuando andábamos con mi padre en La Florida mira que veía pasar carretas y bestias cargadas con grado pa Tenerife y Canaria (...). De aquello no queda nada. Cuando estaba en esos campos me venía la mala idea de que no lloviera, pa el fruto de la tierra se los llevaran otros (...)4.
|
Pero La Florida sigue aún viva en la memoria de muchos vecinos, no sólo de Juan Betancor (ya fallecido), sino numerosas personas a las que entrevistamos para la elaboración de este trabajo, que nos expresaron sus vivencias en este lugar. Allí cuidaron el ganado, jugaron, sembraron, arrancaron, bailaron, se enamoraron, soñaron... Todavía hoy a Mariquita Lola (anciana casi centenaria) le brillan los ojos recordando los buenos momentos que pasó en aquel lugar, y nos canta: Ya ni me divierten coches,/ ni tartanas, ni tranvías.../ Sólo me divierte/ el volver pa La Floría...
La puesta en marcha de un proyecto para la recuperación de La Florida supone en primer lugar salvar un conjunto arquitectónico con unas señas de identidad y una importancia histórica indudable dentro del municipio de Tuineje (incluso insularmente) y, al mismo tiempo, supondría un incentivo cultural y la creación de nuevas infraestructuras sociales dentro del municipio.
III. Metodología de trabajo y propuestas
Esta experiencia se ha llevado a cabo de forma interdisciplinar entre los Departamentos de Geografía e Historia y Departamento de Tecnología del IES Puerto del Rosario. La organización interna supuso la dedicación de unas dos horas semanales al trabajo teórico del proyecto (elaboración de propuestas, investigación, toma de decisiones...) y dos horas de trabajo práctico en el Área de Tecnología, que se dedicaron básicamente a plasmar en diversos soportes la propuesta creativa, en nuestro caso elaboración de maquetas y material audiovisual. Se desarrolló en las siguientes fases:
a) Fase I. Observación. En una primera salida al medio, el alumnado tomó el primer contacto con La Florida; el lugar les atrajo desde el primer momento, y a algunos les fascinó. Fue la fase de observación: tomar notas, sacar fotos, tomar medidas y pensar propuestas útiles para el lugar.
b) Fase II. Documentación e Investigación. Esta segunda fase de dedicó a la búsqueda de información y documentación sobre el lugar. En nuestro caso recurrimos en un primer momento al trabajo con fuentes bibliográficas, y para ello fuimos a la biblioteca canaria del Cabildo de Fuerteventura y otras instituciones... Sin embargo, dadas las características del lugar elegido, vimos la necesidad de acudir a las fuentes orales, por lo que elaboramos una serie de entrevistas para realizar en el pueblo de Tuineje, lugar donde residen actualmente las personas que fueron vecinos de este pago y que podían darnos una valiosa información que completase las fuentes bibliográficas, además aportando incluso propuestas en el afán común de reconstrucción de La Florida.
c) Fase III. Análisis y posibles propuestas. En estos momentos el análisis que hacemos del lugar es el de una situación de abandono total. Sin embargo, observamos las grandes posibilidades que posee La Florida, un conjunto de casas con un entorno maravilloso, cerca de un núcleo principal como es el pueblo de Tuineje, con una tradición histórica importante y cabecera municipal, en el mismo margen de una carretera secundaria que lleva a los principales destinos turísticos del sur de la isla, donde las llanuras y montañas se confunden en el horizonte y donde en el aire se respira todavía el aroma a labranza, a ganado, a cereal, a sequía, a tierra... Tenciendo en cuenta las múltiples posibilidades que ofrece el entorno, y valorando otras tantas necesidades que posee el municipio, se barajaron en un principio las siguientes propuestas de intervención:
- Albergue juvenil.
- Museo de Las Batallas.
- Centro de recreo y ocio (merendero).
- Centro de rehabilitación de discapacitados físicos. Esta opción, si bien era la que mayor acogida tuvo en los primeros momentos, fue descartada por el alumnado al apreciar que las puertas de las casas eran demasiado estrechas y se necesitarían muchas reformas.
- Granja-Escuela para jóvenes del municipio.
d) Fase IV. Elección y desarrollo de la propuesta. En un posterior trabajo de aula se estudiaron las diferentes opciones. El alumnado definitivamente apostó por una alternativa de carácter social, preferentemente para la población joven, dado que según su análisis es una de las principales carencias junto con la cultural que posee Fuerteventura, y en particular el municipio de Tuineje. En este sentido, se acordó solicitar a la Consejería de Asuntos Sociales de ese Ayuntamiento un informe sobre los menores que en el curso 2003/2004 había en situación de riesgo, informándonos que en ese curso académico se hacía un seguimiento aproximadamente a unos 100 menores en distintos colegios e institutos por problemas de absentismo escolar, desajustes familiares, drogadicción, etc. Estos datos apoyaron definitivamente nuestra propuesta de crear en La Florida un espacio que cubriese una demanda social, con un carácter formativo.
IV. ¿Qué queremos para La Florida?
La propuesta creativa para esta zona, por tanto, parte en primer lugar de la necesidad de recuperar un conjunto patrimonial y un entorno con unas importantes señas de identidad para el sur de Fuerteventura, e igualmente para darle un uso de tipo social, formativo y cultural que podría dinamizar esta zona del municipio de Tuineje, incluso con muchas posibilidades turísticas. La Florida se convertiría así en una Granja-Escuela; las casas actuales se restaurarían para ser utilizadas como aulas de formación teórica para un máximo de 15 alumnos/as. Las habitaciones con mayores dimensiones se habilitarían como aulas talleres y espacios comunes (cafetería, salón de usos múltiples). En el exterior se crearía una zona deportiva, un espacio dedicado a merendero abierto al público y gestionado por el propio alumnado, y una pequeña granja con fines productivos y comerciales... Las gavias se reutilizarían como huerto cultivando productos tradicionales y ecológicos.
Las actividades de formación podrían estar orientadas hacia actividades relacionadas con el senderismo y el turismo rural... En este sentido, La Florida se podría convertir en un Centro de Interpretación de Las Batallas, donde los/as alumnos/as formados/as como monitores hiciesen rutas guiadas por la cercana montaña de Tamasite y Llano Florido, explicando a escolares o turistas los hechos históricos relacionados con los ataques de los ingleses a Fuerteventura en 1740, contextualizando de forma singular en ese entorno.
El paisaje de Fuerteventura, su flora, su fauna, su tierra, sus pueblos, sus tradiciones, su Historia... podrían descubrirse y enseñarse desde este rincón singular de la geografía majorera.
V. Ejecución plástica de la propuesta
El soporte que se eligió para exponer esta propuesta fue una maqueta y una presentación en power point. El trabajo se distribuyó por grupos de alumnos/as en función de su motivación y esperiencia en los distintos campos. Para la realización de la maqueta se trabajó con las medidas que el alumnado había tomado, procediéndose en el taller de Tecnología a la elaboración de un boceto inicial y a cortar los materiales (madera) a la escala establecida. Posteriormente, se procedió a la recolección de materiales (piedras, paja, tierra, palos, etc.) con el fin de poder plasmar lo más fielmente posible nuestra propuesta. La última fase se dedicó a la ejecución de la misma.
En ese momento de la experiencia, el grado de autonomía y motivación en el trabajo había llegado a un grado óptimo, y el alumnado acudía al instituto en horario de tarde de forma voluntaria para sacar adelante su proyecto.
Las presentaciones visuales intentaron recoger, de una parte, una síntesis de lo que había sido nuestro trabajo a lo largo de los meses y, de otra, exponer de una forma clara las propuesta creativas.
Este trabajo, junto con el incialmente mencionado Betancuria vive de su historia, representó a Fuerteventura en el Tagoror de Estudiantes celebrado en Santa Cruz de Tenerife en el curso escolar 2003/2004. El resultado de estas investigaciones quedó recogido en unos trabajos que continúan en el Departamento de Geografía e Historia del IES Puerto del Rosario, por si este pequeño sueño de veinte chicos/as alguna institución quisiera hacerlo realidad.
Hoy La Florida sigue marchita, sedienta de sensibilidades que la hagan florecer...
Alumnado del IES Puerto del Rosario con su maqueta en el Tagoror de Estudiantes
Bibliografía
Fuentes bibliográficas
BETANCOR Y RODRÍGUEZ, A. Ataques ingleses contra Fuerteventura, 1740. Cabildo Insular de Fuerteventura, 1992.
GONZÁLEZ ORTEGA, Manuel. Vida y décimas de Juan Betancor. Gobierno de Canarias.
VERNEAU, R. Cinco años de estancia en la Islas Canarias. Graficolor, 1981.
Fuentes orales
. Vecinos del pueblo de Tuineje.
. Dolores Matos Cabrera (Mariquita Lola, especialmente para ella que, con 98 años, supo transmitirnos el amor hacia La Florida).
. Juan Díaz Velázquez.
. Anselmo Cabrera Hernández.
. Maquita Domínguez Matos.
Este trabajo con el alumnado de 4º de la ESO del IES Puerto del Rosario (Fuerteventura) fue coordinado por los/as profesores/as Mercedes Matos Ramón, Juan Carlos Hernández y Carlos Rodríguez. El texto fue publicado en Educación Patrimonial. Propuestas creativas desde el espacio educativo 03/04. Coordinado por Sanjo Fuentes Luis. Editado en el año 2007 por la Consejería de Educación, Universidades, Cultura y Deportes del Gobierno de Canarias.
Notas
1. González Ortega, Manuel. Vida y décimas de Juan Betancor. Gobierno de Canarias, p. 54.
2. Verneau, R. Cinco años de estancia en la Islas Canarias. Graficolor, 1981.
3. Betancourt y Rodríguez. Ataques ingleses contra Fuerteventura, 1740. Cabildo Insular de Fuerteventura, 1992, pp. 81-85.
4. González Ortega, Manuel. Vida y décimas de Juan Betancor. Gobierno de Canarias, pp 40-42.