Afonso se ha convertido en un referente del mencionado instrumento en Canarias. Se encuentra a la espera de lanzar el que será su quinto trabajo discográfico, Macaronesia. En esta entrevista se refiere al montaje La mujer de mi vida, a la situación de la producción cultural en las Islas en el actual contexto de crisis, así como a la progresiva implantación del instrumento que toca en el seno de grupos y parrandas populares.
- ¿Cómo surgió la idea de la producción del musical La mujer de mi vida?
La mujer de mi vida surge para dar respuesta a un encargo propuesto por la anterior corporación del Cabildo de Gran Canaria. Coincidiendo con el Día de las Madres, se trataba de acercar al teatro a un gran número de personas mayores para disfrutar de un musical hecho a medida. Cariñoso y magnífico público, que en ocasiones es poco atendido por los que se piensan valedores de la eterna juventud. La mujer de mi vida nació para tal fin, con cuatro funciones previstas. Pero no fue así. Los asistentes a esas funciones salieron muy contentos, dispuestos a todo por volverla a ver, y lo hicieron saber a concejales y alcaldes. Pidieron que se pusieran en contacto con la productora, que sus hijos y demás parientes tenían que ver el espectáculo, y por descontado volverla a ver ellos también. Así comenzaron todos los municipios a programarnos una y otra, y otra vez.
- ¿Cuál es su planteamiento escénico? ¿Qué elementos escénicos contiene?
En cuanto al planteamiento escénico y los elementos que configuran la escenografía, es un montaje muy sencillo y básico, quizás es nuestra mejor baza para poder trabajar en espacios reducidos, al aire libre y otros donde las condiciones nos ponen siempre a prueba.
- ¿Cuál es el papel de la actriz Carmen Sánchez y cómo sirve de nexo su personaje en el desarrollo dramático del mismo?
Es Elvira y su desazón generada por el paso de los años y la vida; ella es la gran protagonista, todo gira alrededor de su imagen. Las cuatro paredes, los muebles, una casa cada vez más fría y solitaria, y la música, música de sus recuerdos. En este monólogo Mari Carmen Sánchez lo entrega todo, sus emociones a través de la voz, de los gestos, de las miradas, de sus lágrimas, también de su alegría. Elvira, una mujer que ya supera el ecuador de su vida, está sola. Sola con su espíritu, con sus tristezas, sus miedos y fantasmas del pasado.
- ¿Han tenido las mujeres mucha influencia en tu vida?
¿Y en la de quién no? Las mujeres, las amigas, las amantes, parejas, hermanas, tías, abuelas y, sobretodo, madres: lo son todo...
- ¿Qué canciones o temas forman parte del libreto musical de este montaje?
Las canciones que se muestran son las del recuerdo, canciones que siempre han estado ahí, acompañándola, como si se tratara de las bandas sonoras de su vida.
- ¿Qué crees que ha aportado este proyecto a tu trayectoria como intérprete?
Más que como intérprete, el proyecto me ha satisfecho como director escénico. Trabajar con Mari Carmen Sánchez ha sido una experiencia enriquecedora en todos los sentidos.
- ¿Puedes adelantarme en qué estás trabajando ahora? Proyectos de futuro: edición de algún disco, nuevo espectáculo, etc.
Bueno, con carácter inminente preparo la sexta edición del Festival Folk Canarias, que se celebra en el municipio de Mogán los próximos 8, 9 y 10 de abril. Por otro lado, presento el disco Macaronesia, en el que colaboran músicos de Madeira, Azores y Cabo Verde. En verano presentamos dos nuevos espectáculos producidos por Camino Viejo, en fin, mucha actividad y proyectos.
- La crisis económica ha quebrado muchas expectativas en el marco de la producción cultural en Canarias. ¿Qué reflexión sacas de esta coyuntura complicada? ¿Habrá un antes y un después en la Cultura motivado por esta situación?
Afortunadamente, el sector ha contado con el esfuerzo y el apoyo del Gobierno de Canarias a través de sus distintos planes para el desarrollo de la actividad cultural. Nosotros hemos trabajado muy bien, quizás porque el supuesto poco dinero existente se ha gastado en propuestas de aquí, dejando de lado los grandes despilfarros y las grandes producciones de o para los cuatro de turno. Creo que la mayor crisis la ha sufrido la gestión, la poca luz a la hora de programar e invertir los recursos con los que se cuenta. Por supuesto, hay un antes, hay un ahora y habrá un después. El asunto es seguir aquí, y que los creadores tomen la palabra.
- A tu juicio, ¿tu trabajo ha servido para revalorizar el papel del acordeón en el ámbito de la música popular, como lo hizo hace décadas con el timple José Antonio Ramos?
A mi juicio, no se pueden hacer comparaciones. El timple es sello identificador, el sonido de estas Islas… y el maestro José Antonio Ramos puso ese pequeño y querido instrumento nuestro en el lugar más visible de la escena. El acordeón es un instrumento que desde su expansión por los cinco continentes ha sido altamente puesto en valor por muchísimos intérpretes. Mi labor ha sido divulgar su utilización aquí, reafirmar su presencia.
- ¿A qué se debe que el acordeón no haya tenido más presencia como instrumento musical en los grupos de música popular y folclórica de Canarias?
Es un instrumento que llegó a Canarias de manos de los marineros y pronto se convirtió en animador por excelencia de bochinches, de tenderetes y reuniones familiares en las zonas de la costa de la Islas, de las Medianías y de la Cumbre. En las últimas décadas el acordeón goza de muchos adeptos y se ha incluido en muchas parrandas y grupos, así como en las Escuelas de Folclore. Como todas las cosas, ha llevado su tiempo que los grandes estudiosos y sabedores de costumbres, tradiciones y música popular den su visto bueno.