Desde el primer momento el trato por parte de la organización del XXXVI Festival Los Isleños fue estupendo, cercano y familiar, hasta el punto de cedernos sus propias casas de lujo total para nuestra estancia.
La verdad que los diez días se hicieron cortos ya que tuvimos una agenda muy apretada llena de actividades, comidas y actuaciones. El primer día fue de relax, mañana libre para descansar, y ya por la tarde noche estuvimos en el local social de Los Isleños donde se nos dio la bienvenida de forma oficial y primera toma de contacto con el pueblo, la mayoría descendientes de los canarios, donde compartimos una magnifica cena. El miércoles sirvió para conocer la ciudad de Nueva Orleáns; por la noche regreso y cena que nos brindó uno de los vecinos en su propia casa. El jueves comenzaron las actuaciones con dos en centros de enseñanza de Primaria y por la tarde un centro de formación profesional con una gran participación por parte de los asistentes; cerramos la jornada con una gran cena a base de marisco brindada por otro de los vecinos. El viernes tuvimos dos actuaciones en centros de enseñanza de Primaria con una gran participación por parte de los alumnos, al mediodía recepción oficial por parte de la corporación del Ayuntamiento St. Bernard Parish, en el salón de plenos con una cesión extraordinaria con un único punto del dia: el de nombrar ciudadanos honoríficos de la ciudad de St. Bernard Parish a todos y cada uno de los que viajaron a Lousiana. El fin de semana, sábado y domingo, estuvo enfocado a la participación en el festival con dos actuaciones cada día y una misa canaria el domingo. El lunes excursión y cena de despedida en uno de los mejores hoteles de la ciudad.
Si por algo se caracterizó esta gira fue por la cercanía del público, la integración y las conversaciones entre los grupos y público, donde te agradecían el estar allí con ellos. Era muy usual que preguntaran los apellidos para comprobar si eras familia de ellos; otras de las cosas que les gusta mucho son las parrandas improvisadas.
La expedición fue acompaña por el primer teniente alcalde de la ciudad de Arucas, Juan Francisco Padrón, de Gáldar no acudió nadie a pesar de pasar una invitación al grupo de gobierno del ayuntamiento. La teniente alcalde Encarnación Ruiz contestó por escrito que agradecía la invitación pero que no podía acudir.
Los Cabuqueros de Arucas y Los Cebolleros de Gáldar han calificado el viaje como algo extraordinario ya que todo ha salido estupendo y maravilloso. Aprovechamos la ocasión para agradecer a la organización del festival las atenciones con nosotros y toda la hospitalidad y simpatía demostrada en estos maravillosos diez días.