Su elaboración, teniendo en cuenta la distribución insular de las expresiones culturales canarias, facilitará la base documental que permita transmitir este conocimiento a los colectivos implicados y a la sociedad en general, aportando además medidas que favorezcan su continuidad y protección. El Atlas se viene realizando según los criterios de la Convención de la UNESCO para la Salvaguarda del Patrimonio Inmaterial del año 2003, al que se adhiere el Estado español en 2006, y el Plan Nacional del Patrimonio Inmaterial, aprobado en el Consejo Nacional de Patrimonio que reúne a las CCAA y el Estado. En esta convención, el Patrimonio Inmaterial quedó sujeto a un orden normativo con rango de Tratado Internacional. A través de ella, dicha Institución realizó una definición del Patrimonio Inmaterial equiparable al concepto de cultura en sentido antropológico y consideró necesario preservarlo como crisol de la diversidad cultural, algo inherente al género humano y necesario como garante del desarrollo sostenible.
La rápida capacidad de transformación del Patrimonio Inmaterial y el escaso número de elementos documentados de forma sistemática y a escala regional, hasta el momento, hacen necesario llevar a cabo algunas medidas encaminadas a salvaguardar este legado: documentación y registro; difusión y puesta en valor; salvaguardia y fomento; capacitación y formación; cooperación y colaboración. Para hacer viable este ambicioso proyecto fue preciso priorizar a fin de garantizar la consecución de objetivos a medio y largo plazo. Como medida inicial, a principios de 2010 se realizó el diseño de las fichas aplicando los principios de la Convención y bajo el enfoque disciplinar de la Antropología social.
Se dividieron en cinco grupos temáticos: Las tradiciones y expresiones orales, que se corresponde con la categoría 1 de la UNESCO. El segundo grupo sería el de las artes del espectáculo, que abarcan una diversidad de expresiones culturales que en su conjunto dan testimonio de la creatividad humana. El tercero serían las prácticas sociales, rituales y los rituales festivos. Un cuarto bloque tendría que ver con el conocimiento y prácticas relacionadas con la naturaleza y el universo. Finalmente, un quinto bloque que incluiría las categorías 4 y 5 de la Unesco corresponderían a los conocimientos, técnicas o actividades económicas de producción y transformación.
En 2011, se procedió a asignar los trabajos de registro y documentación del primer bloque temático reseñado. Las expresiones orales se han asignado a la Academia Canaria de la Lengua, y las manifestaciones musicales a la Asociación Cultural Lagareta. Ambas entidades finalizarán las fichas correspondientes en el mes de diciembre de 2012.