Trece años de obras, casi cinco millones de euros en inversiones y multitud de problemas técnicos y burocráticos. Éste seria un simple resumen para definir las vicisitudes por las que ha atravesado la rehabilitación del auditorio de Los Jameos del Agua desde que en el año 2001 tuviera que cerrar sus puertas al público por la caida de varias piedras desde la bóveda de esta cueva volcánica.

El consejero de Obras Públicas del Cabildo de Lanzarote, José Antonio Gutiérrez, aseguró ayer, durante la visita del presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero, a Los Jameos, que el objetivo de la corporación insular es reabrir el auditorio el próximo mes de junio una vez que se culminen los últimos trámites administrativos encaminados a lograr los permisos definitivos.

La oficina del Plan Insular del Cabildo de Lanzarote tendrá que elaborar el proyecto integral de legalización de todas las obras que se han ejecutado en Los Jameos del Agua desde el año 2001 con una inversión de 4,4 millones de euros aportados por el Gobierno de Canarias y el Cabildo. Una vez realizado este informe de legalización le tocará el turno al Ayuntamiento de Haría que será el que otorgue las licencias de instalación y apertura.

La intervención en el auditorio de Jameos del agua ha entrañado una enorme complejidad técnica, especialmente la actuación que tenía por objeto subsanar el principal problema de este espacio y el que llevó a su cierre por motivos de seguridad hace trece años, que era el desprendimiento de algunas piedras de la bóveda. El coste de estos trabajos ascendió a los 2,6 millones y a pesar de haber concluido en el año 2009 el auditorio sigue cerrado, fundamentalmente por los problemas legales y medioambientales originados por la instalación del montacargas.

Para sellar la cúpula del auditorio se tuvieron que realizar más de 10.000 catas en la piedra y señarlas con resina y fibra de carbono. De hecho, la empresa que se adjudicó este trabajo tuvo que fabricar máquinas especiales para introducir la resina en la roca.

No obstante, atajar el riesgo de nuevos desprendimientos y goteras en el auditorio ha exigido más actuaciones en la construcción, como la impermeabilización exterior de la bóveda, con un coste de 128.686 euros y la protección con una malla metálica y una limpieza interior, que ha supuesto 64.510 euros. Asimismo, se han acondicionado los siete camerinos por un total de 322.713 euros.

El personal de mantenimiento de los Centros Turísticos procede estos días a retirar el polvo acumulado en las rocas del auditorio por las obras que se vienen llevando a cabo durante los últimos años. Para la limpieza de la roca volcánica se ha instalado un pequeño andamio que les permitirá llegar a todos los rincones de la cueva y poder utilizar de esta manera aire a presión para retirar todo el polvo. Además, queda por instalar el equipo de sonido y el aire acondicionado de los camerinos.