La finalidad de este circuito itinerante, que recala en el municipio norteño, es que todos los vecinos tengan la posibilidad de conocer la gesta del 25 de julio, y por esta razón la exposición, con un claro espíritu divulgativo, hace un recorrido por el tiempo plasmando las distintas formas de representar los hechos en las diferentes épocas históricas.

Nelson y Tenerife, una doble mirada rememora la gesta del 25 de julio de 1797, en la que, como al uso se suele decir y repetir, los habitantes de la isla dieron ejemplo de valentía y respeto al enemigo en unas condiciones muy inferiores a los invasores. La forma en la que se presenta esta exposición, por medio de 13 paneles con textos e imágenes, permitirá divulgar de una forma amena y comprensible aspectos históricos, arquitectónicos y artísticos que ayudan al espectador a tener una amplia visión de cómo se desarrollaron los acontecimietnos.

Este ataque tuvo tanta transcendencia, y marcó de tal manera la historia de Tenerife y su capital, que el el propio escudo de Santa Cruz de Tenerife hace referencia a este hecho histórico que, como otros de la misma naturaleza, marcaron el futuro insular y, de alguna manera, de todo el Archipiélago. Las tres cabezas negras de león cortadas que figuran en él representan las victorias sobre los ataques de Blake, Jennings y Nelson. El color negro significa el carácter traicionero de estos ataques violentos sufridos por una población pacífica. La tercera cabeza, el ataque de Nelson, está atravesada por la espada de la Orden de Santiago de color rojo que se asoma detrás de la cruz fundacional. Tanta es la importancia del hecho, al menos en la interpretación histórica tradicional, que Santiago es el patrón de la ciudad porque fue precisamente un 25 de julio, día de Santiago Apóstol, cuando se venció a Nelson.